EL PROCESO DE LA VOCACIÓN
1. ORACIÓN
"Señor, ¿qué quieres que haga?” (Hch 22,10)
La vocación no es algo que inventas, sino algo que descubres
2. PERCEPCIÓN
"Había dentro de mí como un fuego devorador encerrado en mi cuerpo; he intentado apagarlo y no he podido”. (Jer 20,9)
Para descubrir lo que Dios quiere de ti, necesitas escuchar, mirar y experimentar
3. INFORMACIÓN
"Fijaos cómo es el país y si sus habitantes son fuertes o débiles, pocos o numerosos. Mirad si la tierra en la que habitan es buena o mala; si sus poblaciones carecen de murallas o son ciudades fortificadas; si el país es fértil o pobre, si hay o no bosques. ¡Sé suficientemente firmes para llevarnos frutos del país!” (Nm 13,18-20)
Infórmate bien sobre las distintas opciones y caminos vocacionales
4. REFLEXIÓN
"¿Quién de vosotros, si quiere construir una torre, no se sienta primero en calcular sus gastos y ver si tiene recursos para terminarla? De lo contrario, si ponía los cimientos y no podía terminar la obra, todos los que lo verían, empezarían a burlarse de él diciendo: Este hombre empezó a construir, pero no ha podido terminar” (Lc 14,28-30)
La vocación es una empresa de por vida.
5. DECISIÓN
"Te seguiré por donde vayas” (Lc 9,57)
Decidir es difícil y tus limitaciones pueden parecer montañas, pero responde con fe como Isaías: “Aquí me tienes, Señor, envíame”. La decisión es un acto de confianza en Jesús. Es normal tener dudas sobre si podrás cumplir con las exigencias, pero no dudes de tu deseo de seguirlo.
6. ACCIÓN
“Él les llamó. Ellos dejaron inmediatamente la barca y el padre y le siguieron”.
(Mt 4,21-22)
Pon todos los medios a tu alcance para cumplir con lo que has decidido. Prepárate para vencer los obstáculos, porque siempre habrá dificultades en la vida. No se trata de cargar hoy con la cruz de toda la vida, sino con la de cada día.
7. ACOMPAÑAMIENTO ESPIRITUAL
“Levántate, ve a Damasco y allí te dirán todo lo que he determinado que hagas.” (Hch 22,10)
Te ayudará a prepararte adecuadamente para realizar tu decisión. Aunque la vocación es una llamada de Dios que nadie puede escuchar por ti, necesitas de alguien que te acompañe en tu discernimiento vocacional. Dios te revela su voluntad de muchas maneras y es el más interesado en que descubras y realices tu vocación. Ruega, dialoga con tu acompañante espiritual, percibe, infórmate, reflexiona, decídete y actúa.
EQUIPO DE ACOMPAÑAMIENTO
En el Seminario Diocesano de Torreón, los formadores sacerdotales se distinguen por su profunda vocación y dedicación. Estos guías espirituales no solo transmiten conocimientos teológicos y filosóficos, sino que también encarnan los valores de la fe y la pastoral.
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